El sábado a la tarde me llamo Max (sobre él hay un post pendiente donde explico su procedencia y el lugar que ocupa en mi vida) me pregunto si tenía ganas de salir… como al día siguiente eran las elecciones, para despejar la mente le dije que sí, que nos veíamos en el supermercado que está cerca de su casa, para después ir a algún parque por helado.
Fuimos a un parque que está aquí en la ciudad, dimos varias vueltas y al final decidimos ir al boulevard que va desde Cd. Jardín hasta Cd. Plateada, claro que a su paso recorre mi ciudad. Es un boulevard bonito, me recuerda a los boulevard de las ciudades gringas, con muchos locales, negocios, franquicias, muchos carros y personas. Buscábamos algo de beber (alcohol), pero como al día siguiente había elecciones, la ley seca no permitía la venta de bebidas alcohólicas, ni modo!
Después de caminar por un bien rato regresamos al parque, donde habíamos dejado aparcado el coche y allí nos sentamos a platicar… pero en eso recibo una llamada al celular por parte de mi madre, preguntando dónde estaba y advirtiéndome que no llegara a la casa, pues justo afuera de ella se encontraba un grupo tirándose de balazos y acaban de levantar (secuestrar) a un chavo… le dije que no se preocupara que estaba con Elisa, (primera mentira), en casa de ella (segunda mentira). Ella más calmada dijo, está bien quédate a dormir en casa de ella, no vengas a casa esta noche, yo le dije que estaba bien que me quedaría en su casa y mañana llegaba temprano para estar listo para las jornadas electorales (tercera mentira)
Así que llame a Elisa, para ver si podía darme asilo en su casa por esa noche, pero ella no estaba en casa, se encontraba de fiesta en una colonia muy alejada y peligrosa, así que después de pensar decidimos (Max y yo) buscar algún lugar para pasar la noche… y el lugar lo encontramos un hostal en el centro de la ciudad llamado “Dorian”.
Decidimos quedarnos allí porque no queríamos ir a algún motel, los cuales están a las afueras de la ciudad y se usan más que nada por parejas calenturientas que van a tener sexo allí… y nuestro plan no era ese, nosotros solo buscábamos algún lugar seguro para pasar la noche. El hostal era muy barato, pero pronto descubrimos que no difería mucho del uso que se le da a los moteles…
Era una casona vieja en el centro de la ciudad, de dos pisos y patio en medio. Las habitaciones eran de techos altos y con vigas de madera para sostenerse hechas con adobes (ladrillos hechos de barro cocido)… casas muy frescas en verano y calientes en invierno, con muchos cuartos que servían para hospedar a las parejas… nuestro cuarto? en el segundo piso, al final de corredor con una pequeña ventana que daba a no sé dónde.
El cuarto, y todo el lugar, era realmente decadente, con un color amarrillo en las paredes, despintadas por el tiempo y un ambiente más bien húmedo, mohoso diría yo. El cuarto no tenia mobiliario solo una cama empotrada en una tarima y de cemento y a los lados, como mesitas de noche, unos cubos de cemento pegados a la pared y al suelo. Creo que lo peor de todo era el servicio, que se encontraba en la misma habitación, tan solo separado por una pequeña bardita… eso más que hostal parecía cárcel…. Un ventilador de techo nos proveía de un poco de aire, porque la habitación estaba muy encerrada, y para acabarla, la puerta ni siquiera tenía cerradura, apenas si se atoraba, lo que me hacía sentirme un poco desprotegido
Yo estaba realmente asustado, por el lugarcito al que fuimos a caer y por las mentiras dichas a mis padres, que me creían dormir plácidamente en cada de Elisa… además de que estaba impactado, pensaba: esta mañana al despertar, nunca hubiera imaginado que estaría aquí con Max… La noche era fresca y húmeda, yo todo asustado busque refugio en los brazos de él, que tarareaba unas canciones que había puesto en su celular.
Estaba recostado en su pecho oyendo el palpitar de su corazón y calmándome con su acompasada respiración, cuando de repente le doy un beso, después unas caricias y una cosa llevo a la otra…. apagamos la luz de la habitación y comenzamos a disfrutar del cuerpo del otro.
Debo reconocer que me encanto y a pesar de que pensaba: qué asco de cama, cuantas parejas sudorosas no han pasado por aquí… eso fue lo de menos la pase increíble sintiendo su cuerpo, su sexo entero, sus labios. Y debo decir que Max sabe donde besas, como recorrer mi cuerpo entero, se ve que él si tiene experiencia y no es un alguien desabrido…
Después del primer round nos detuvimos y estuvimos acostados un rato, abrazados, platicando, acariciándonos, Max es genial, me hizo sentir vivo sexualmente de nuevo, me hizo sentir deseado… pero no solo por mi cuerpo, si no por mi intelecto también… y allí le dije: sabes yo estaba empachado de amor, pero creo que tu eres mi laxante, porque de a poco me estas curando… jajaja que romántico no??
El me dijo de las cosas más bellas que me han dicho… me hizo sentir valioso, querido, deseado, pero esas cosas no las cuento que son sólo mías, solo las sabremos él, yo y la habitación de ese hostal donde como nosotros habrán pasado mil parejas más…
Y después el segundo round, aun mas pasional, aun mas besos y caricias… para terminar cansados y con mucho sueño… y dormir abrazados el uno del otro… bueno lo de dormir es un decir pues a las 6:00 teníamos que salir de allí, para enfrentar un nuevo reto, un nuevo día.
Genial...!!! q sigann levantando chavos (aunque sea de mentira)... para q noches así se repitan...!!! jaaaaaaaaa...
ResponderEliminarLas cosas que no se piensan y planifican son las que mejor salen luego. Me alegro muchísimo por ti y que pasaras un momento tal dulce e intimo con max. Te merecías ese intanste.
ResponderEliminarUn besito cielo
tu caballero español.
que bonito niño! de verdad que si *_* **suspirote**
ResponderEliminarY uste' donde se ha metido toda la semana?
ResponderEliminarA veces todo se confabula para que ocurran estas cosas tan especiales... Me alegro muchísimo. Y desde luego, cuando la compañía merece la pena, lo de alrededor es lo de menos :)
ResponderEliminarUn beso y que siga la racha!
Mi chico cree que es el cosmos el que rige estas casualidades... Me encantó que liberaras tu alma de esa carga dolorosa y encontraras en Max un nuevo principio.
ResponderEliminarUn abrazo,
PFE
-- 9/7/2010 --
El lugar fue lo de menos lo que importó es que se sintieron bien.
ResponderEliminar¿Y al otro día, llegaste temprano metirosillo?.