domingo, 1 de noviembre de 2009

Peridido y temeroso

El local de Selina está en la otra ciudad, Ciudad Grande, así que tenía que regresarme a la casa algo tempra, para alcanzar bus..




Pero como han cambiado el horario oscurece mucho más temprano ya para las 18:00 el sol ya se está ocultando… el local está lejos de la parada de mi autobús, pero no tanto como para caminar, y como a mí me encanta caminar cuando el clima esta frio, decidí ir hasta allá a pie, son como 10 cuadras..pero yo tenía ganas de caminar… que error



Recuerdo que cuando niño fuimos a un día de campo, a pasar un rato con los amigos de mi jefe, al campo, como a 25 minutos de la ciudad a un lugar cerca del río… cuando es verano y abren la compuertas de la presa se llena el río y las familias y los amigos acostumbran ir a pasar el día allí, preparar carne asada (parrillada), o unos sándwiches, jugar al aire libre, darse un baño, siempre y cuando el río no vaya muy crecido… aun ahora sigo yendo, con los amigos… a refrescarse y tomar una birrias (cerveza)…



Pero bueno a lo que iba, esa vez fuimos con los amigos de mis padres y recuerdo mucho esa vez, porque me extravié, no fue mucho, a lo sumo 25 minutos, tiempo que nadie notó…yo tenía como 7 años recuerdo que los chicos estábamos jugando a orillas del río, que más bien ya era un pequeño arroyo, cuando a mí me dieron ganas de devolverme a con mis papás y la gente mayor, pero ellos estaban un poco alejados de nosotros y al yo querer volver me equivoque de camino y me fui por donde no era…



Camine por un rato, una distancia larga, larga porque yo sabía que donde estaban papás estaba en corto y no había que caminar mucho… pero seguí caminando, para entonces ya empezaba a preocuparme, pues no sabía ni donde me encontraba… hasta que llegue a un lugar donde estaba una familia también de picnic, me preguntaron que buscaba y que si estaba perdido, supongo que me delataba mi actitud temerosa y mis ojos aguados… yo dije que estaba bien, que iba a con mi papás, que seguramente estaban adelante… ellos dijeron no niño más adelante no hay nadie, solo uno que otro borracho, ven quédate con nosotros… a mi me dio miedo y salí corriendo en dirección opuesta, por donde había venido caminando… ahora recuerdo a esa familia distorsionada creo que eran personas gordas, porque al evocar esto a mi mente llega el paisaje de aquel lugar con personajes zoomorfos, una mujer gorda, celulítica y con cara de marrano que con sus hocico y nariz de cerdo me dice que me quede con ella, una hombre y unos niños aterradores, igual de cerdos que la madre… una familia de cochinos…



Pero llegue a donde estaban mis padres, no sé cómo, pero volví con ellos, al llegar abrace a mamá, quien nunca supo que había pasado, nunca nadie lo supo, a nadie le dije, de hecho es la primera vez que lo cuento.





por qué saco a colación esta historia? Porque cuando venía de con Selina, caminando por las calles del centro, ya oscuras, sentí miedo, sentí temor y recordé aquella vez… me sentía igual, con miedo, solo, las calles se hacían más oscuras y largas, el aire más frio, todo era más peligroso, la gente se volvía contra mi… apretaba el paso, pero no podía ir muy rápido, desde esta mañana que jugué futbol, me lastime el chamorro y me dolía si trataba de caminar demasiado rápido…



Caminaba solo, temeroso, con incertidumbre, dubitativo, temeroso, con el pecho oprimido, me sentía tan perdido, tanto como aquella vez, necesitaba a alguien a mi lado o al menos saber que tendría quien me diera un abrazo… los tiempos han cambiado y ahora no quería un abrazo de mi madre, quería un abrazo de alguien que me dijera te amo, eres todo para mí…tenia miedo, miedo de los vagabundos del centro, de esos pobres, desvalidos, lisiados… y vi cerdos, les vi facciones porcinas como a aquellas personas de la infancia…




Llegue a la parada del autobús y me quede dormido, dormido en el camión por suerte desperté a tiempo para bajarme cerca de casa…

3 comentarios:

  1. Ouch... Eso si da miedo. Es increíble lo mucho que pueden cambiar las calles entre el día y la noche: Por la mañana, lucen llenas de vida, con gente a quien realmente no se le presta mucha atención; pero después del ocaso, todo es silencio, y viene un miedo terrible :S

    Pero al menos saliste bien de todo ello :P

    Por cierto, ya estoy ansioso para conocer por TV el nuevo estadio de los Santos Laguna :D

    Saludos, abrazos y besos desde Puebla ;)

    --Arminius, lesbiano reprimido.

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  2. He sentido esa misma sensación de miedo muchas veces, que yo soy muy cagón. Ir mirando a todos lados, pensando que alguien me sigue, que están detras de mi.. uf, que sensación más mala, pero al menos saliste bien parado. jejej

    Un besito cielo

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  3. Como he disfrutado ese post, me has hecho sentir tus sensaciones, y esa historia de cuando eras niño es muy entrañable.

    Un abrazo,

    Josep

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simplemente gracias por comentar